REDACCIÓN.- A tres meses de la tragedia del Jet Set, que dejó 235 fallecidos y más de 150 heridos, familiares y sobrevivientes continúan clamando justicia mientras permanece pendiente la apelación de la medida de coerción contra los propietarios del centro nocturno. Han transcurrido 91 días desde que el techo de la discoteca se desplomó, causando una de las tragedias más devastadoras del país.
Los propietarios del establecimiento mantienen su libertad bajo fianza, mientras el Ministerio Público depositó la apelación de la medida de coerción. Los familiares de las víctimas expresan su frustración por la falta de acercamiento de la familia España, propietaria del local, denunciando que no han recibido «ninguna oferta, ningún consuelo, ninguna palabra de aliento».
Este miércoles se realizará la exhumación de los restos de una de las víctimas para determinar las reales causas de su muerte, ya que el acta de defunción establece que fue por «muerte natural» cuando en realidad falleció por los escombros del desplome. La necropsia se realizará en Jardín Memorial con la participación de miembros del Ministerio Público.
Los familiares continúan viviendo un duelo que no termina. «No hay día que uno no la llore… lamentablemente yo no tengo mucha esperanza en la justicia», expresó una familiar. Los deudos de Los Alcarrizos mantienen sus peregrinaciones mensuales al lugar de la tragedia, prometiendo continuar «todos los meses que sean necesarios para que las autoridades entiendan».
En la mañana del martes se realizó una misa para recordar a las víctimas, mientras que en la tarde grupos de personas visitaron las ruinas de la discoteca para recordar la última vez que se comunicaron con sus seres queridos. Los sobrevivientes continúan lidiando con los traumas físicos y psicológicos de aquella fatídica noche.
