SANTA ANA.- Un acalorado intercambio entre la rapera Cardi B y el abogado de un hombre que la demandó por infracción de Grammy se volvió tan intenso el miércoles que el juez detuvo brevemente el juicio.
La ganadora del Grammy respondió a varias preguntas del abogado A. Barry Cappello, quien representa a un hombre que afirma que el rapero abusó de su imagen en la portada de un mixtape de 2016.
El ir y venir irritable entre Cappello y el testigo estrella llevó al juez federal de distrito Cormac Carney a enviar a los miembros del jurado fuera de la sala del tribunal de Santa Ana, California, y decirles a ambas partes que estaba considerando anular el juicio. Después de un descanso, calificó la discusión de «poco profesional» y «no productiva», pero permitió que se reanudaran las preguntas, imponiendo nuevas restricciones para ambas partes.
Kevin Michael Brophy busca $5 millones de Cardi B por la aparición de algunos de sus distintivos tatuajes en la espalda en la obra de arte del mixtape, que muestra a un hombre tatuado por detrás con la cabeza entre las piernas del rapero.
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La rapera dijo que sentía que Brophy no había sufrido ninguna consecuencia como resultado de la obra de arte, pero que la había acosado legalmente durante cinco años. En un momento dijo que extrañaba un momento especial con su hijo menor, quien recientemente cumplió 1 año.
“Tengo empatía por la gente”, dijo. “Me preocupo por la gente. Siento que me están aprovechando. Me perdí el primer paso de mi hijo al estar aquí”.
Brophy le dijo al jurado el martes que se sentía «humillado» por la obra de arte atrevida.
En un momento, Cardi B señaló que la cara del hombre no se puede ver en la obra de arte. Capello le pidió que se calmara, pero ella respondió a la afirmación del abogado de que sabía sobre el software de edición de fotos utilizado para poner los tatuajes de Brophy, que han aparecido en revistas, en el cuerpo de otra modelo.
“No es la espalda de tu cliente”, dijo sobre la imagen, que muestra a una modelo negra. Brophy es blanco. La rapera dijo que publicó una foto de la “famosa modelo canadiense” en sus redes sociales.
Cardi B, cuyo verdadero nombre es Belcalis Almanzar, dijo que un artista usó solo una “pequeña porción” de los tatuajes sin su conocimiento. Anteriormente había dicho que la portada, creada por Timm Gooden, era un uso justo transformador de la imagen de Brophy.
Cappello dijo que a Gooden se le pagó $50 para crear un diseño, pero luego se le dijo que buscara otro tatuaje después de entregar un borrador inicial. Dijo que Gooden buscó en Google «tatuajes en la espalda» antes de encontrar una imagen y pegarla en la portada.
El abogado de Cardi B, Peter Anderson, dijo que Brophy y la imagen del mixtape no están relacionados, y señaló que la modelo no tenía tatuajes en el cuello, cosa que sí tiene Brophy.
“No es él”, dijo el rapero. “Para mí, no se parece en nada a su espalda. El tatuaje fue modificado, lo cual está protegido por la Primera Enmienda”.
Ella dijo que la imagen no ha impedido el empleo de Brophy con una popular marca de ropa de surf y skate o su capacidad para viajar por el mundo en busca de oportunidades.
“No lo han despedido de su trabajo”, dijo Cardi B, quien dio a entender que el mixtape no era lucrativo para ella. “Él no se ha divorciado. ¿Cómo ha sufrido? Todavía está en una tienda de surf en su trabajo. Por favor, dime cómo ha sufrido.
Brophy, un hombre de familia que se describe a sí mismo, dijo que envió una carta de cese y desistimiento a los representantes de Cardi B para eliminar la imagen, pero nunca recibió una respuesta. La rapera dijo que no había visto la carta.
En un momento, Cardi B dijo que no revisa su buzón porque eso es para «personas mayores», lo que provocó que algunos en la sala del tribunal se rieran.
Cuando Cardi B salió del juzgado, se vio rodeada por alrededor de 30 estudiantes de secundaria que intentaban tomarse selfies con ella. Mientras la rapera caminaba hacia su vehículo con seguridad, ella sonrió y saludó antes de decirles que respondería mejor después del juicio.
El mes pasado, Cardi B se declaró culpable de un caso penal derivado de un par de peleas en clubes de striptease de la ciudad de Nueva York que la obligaron a realizar 15 días de servicio comunitario. A principios de este año, el rapero recibió 1,25 millones de dólares en una demanda por difamación contra una famosa bloguera de noticias que publicó videos afirmando falsamente que consumía cocaína, había contraído herpes y se dedicaba a la prostitución.
