Francisco Peña: Alcalde histórico de Santo Domingo Oeste
A principios del 1980, Francisco Peña, ingeniero agrónomo de profesión, adquiere un solar propiedad de los Garrido Puello, en Villa Aura, Las Caobas, Santo Domingo, Distrito Nacional y decide mudarse con su esposa la señora Ninfa Pérez y sus hijos Klendy, Massiel y Francis.
Estos hacían su vida normal como las familias tradicionales dominicanas, sus hijos estudiaron en el Colegio Los Milagros y en el Politécnico Las Caobas, sin saber lo que la vida y el destino le guardaban.
Pasaba el tiempo, ya con sus hijos no tan pequeños, fue designado coordinador de campaña en la región oeste I Distrito Nacional, por el ex presidente de la República Dominicana, Ing. Agrónomo Hipólito Mejía (Rey Midas, porque todo lo que toca lo convierte en oro y padre de la Primera Alcaldesa de la Primada de América, Carolina Mejía).
Al resultar Hipólito Mejía, electo presidente de la República Dominicana en las elecciones del 2000, el Francisco Peña, fue designado intendente de lo que hoy es Santo Domingo Oeste y mediante el voto de más del 62 % del electorado de esa demarcación fue electo en el 2002, como el primer alcalde de lo que se convirtió por ley en el municipio Santo Domingo Oeste.
Por su buen trabajo, que fue basado con parte del programa primero la gente, heredado del extinto líder del Partido Revolucionario dominicano, Dr. José Francisco Peña Gómez, fue reelecto en las elecciones municipales del 2002 al 2006, 2006 al 2010, en el 2010 al 2016 fue sustituido por su hijo Francis, En el periodo 2016 al 2020, Francisco Peña reelecto alcalde nuevamente.
En su gestión municipal se dedicó arreglar y construir calles, inició el saneamiento de la cañada de Guajimía, también fueron creadas escuelas laborales y parques.
Por la seguridad que brindaba su gestión, fueron construidos muchos residenciales y urbanizaciones, plazas comerciales, uno de los cines más modernos del país.
Gran parte del presupuesto fue destinado al pago de ayudas a esos sectores más vulnerables, los ancianos, las madres solteras y los estudiantes, asumió la recogida de basura, ya que no era obligatorio el pago de este servicio.
El municipio cambió de ser zona de tolerancia, como era conocido por la gran cantidad de bares y discotecas, a ser un municipio cristiano, ya que todos esos antros de corrupción fueron desapareciendo, dando paso en su lugar a iglesias, escuelas, mueblerías entre otros.
Con una manera peculiar, era normal verlo en las calles del municipio, tomándose un café en la casa de cualquier munícipe que lo invitara, asistía a casi todos los sepelios, no tenía horario para recibir a los munícipes tanto en su oficina como en su casa, su casa era la casa del pueblo, no veía bandera política a la hora de ayudar a quien lo necesitara.
Humilde, sencillo, conoce cada rincón del municipio, los munícipes se sentían cómodos con él, ya que era el sentir de la comunidad, las oficinas del ayuntamiento estaban abiertas para todos.
Es difícil que el municipio olvide la labor social, de ese hombre a quien todos favorecieron con el voto, en varios periodos consecutivos, ese hombre que era padre, protector de todos.
Dios te bendiga Francisco Peña, alcalde histórico Santo Domingo Oeste!
Avancemos por el buen camino, siempre dirigidos por el poder de Dios.
Excelente artículo