FILADELFIA.- La nueva y moderna sociedad dominicana ha ido cambiando constantemente, transformándose de manera vertiginosa y agigantada en los últimos 20 años, pero unos que otros jóvenes líderes cívicos quisqueyanos fueron cambiando el panorama, la temática, el pensamiento ideológico y la teoría política planteada públicamente a la sociedad y programas de gobiernos nacionales de las organizaciones partidarias en cuestión.
Sin embargo, una gran mayoría de las dominicanas y dominicanos no entendieron de forma clara las nuevas orientaciones, planteamientos sociales y políticos que externaba y/o decía públicamente Leonel Fernández al país y a la militancia del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que atentamente escuchaba y repetía entre miles de seguidores y todo esto ocurría luego de la desaparición física del circunspecto, venerable y queridísimo profesor Juan Bosch.
A partir de la desaparición física de Juan Bosch, Leonel Fernández se creció bastante como líder de los peledeístas, dijo que Bosch era ya un desquiciado mental y planteó que no podían seguir sus ideas divorciadas de la realidad política objetiva.
Los jovencitos más despiertos y orientados, que en esa época ya militábamos en algunas formaciones políticas de izquierda, ya veníamos conociendo las diferencias políticas abismales que sostenía y comenzaba a plantear en algunos círculos de su entorno, Leonel Fernández contra el doctor Joaquín Balaguer y su viejo maestro profesor Juan Bosch.
Con estas orientaciones falsas, discursos de engaños y traiciones políticas a Joaquín (Elito) Balaguer, Juan Bosch y al pueblo dominicano, el entonces joven intelectual y brillante líder político comenzaba a abrir un amplio espacio para que sus amigos personales, reconocidos cuadros y militantes del PLD se robaran impunemente las propiedades nacionales y todos los recursos del erario.
A principio de 1987 yo, apenas con 25 años de edad, conocí y saludaba a Juan Bosch que en esa época hacía el periódico Vanguardia del Pueblo, editado en Alfa & Omega, un medio periodístico noticioso de carácter educativo y en el cual a través de opiniones, Juan Bosch planteaba gobernar sanamente y sin robarse un solo centavo de los fondos públicos.
Juan Bosch insistía constantemente comunicando al pueblo dominicano esas excelentes ideas políticas por diferentes medios que se difundían en la pequeña nación y de esa forma establecer una nueva administración publica más seria, más democrática, donde se respetaran las instituciones del Estado dominicano y no se perdieran en bolsillos de funcionarios los recursos económicos del mismo.
Luego de un acuerdo político nacional entre Balaguer y Bosch para evitar que el doctor José Francisco Peña Gómez llegara al poder, eligieron a Leonel Fernández y desde ese entonces comenzaron los saqueos desmedidos e incontrolables a las riquezas nacionales, todos los altos dirigentes, medios y amigos personales de las administraciones y/o gobiernos de Leonel Fernández y Danilo Medina se robaron cientos de miles de millones de pesos y dejaron el país en total banca rota.
Entonces de qué forma las dominicanas y dominicanos conscientes, que les duele en carne propia el doloso manejo de los recursos económicos de la nación, no creo que vuelvan a creer en Leonel Fernández y los tiguerazos-ladrones de la Fuerza del Pueblo y mucho menos de la banda mafiosa del PLD, que llegaron en chancletas al gobierno, salieron amasando riquezas y fortunas que jamás en sus vidas soñaron tener.
De tal manera y después de haber observado, leído sus mensajes mediáticos de prensa, estudiado y analizado muy bien su contenido puedo teorizar, decir claramente y predecir hoy que el pueblo dominicano jamás elegirá a supuestos líderes políticos, falsos y ladronazos como los actuales dirigentes de la Fuerza del Pueblo y del Partido de la Liberación Dominicana, espero que nunca más vuelvan a gobernar el país.
Millones de dominicanas y dominicanos que hace algunos meses votamos masivamente por el licenciado Luis Rodolfo Abinader Corona, quien fuera candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y hoy presidente constitucional de la República Dominicana, se ha dislocado y dejado confundir de sus enemigos políticos peledístas, dejándolos en las posiciones públicas que todavía ostentan y los perremeístas en las calles, jalando aire.
