NUEVA YORK.- Julio César (Yulín) Mateo, presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM NY), le respondió a Franklin Rodríguez, senador por San Cristóbal, que “nosotros hemos transparentado y moralizado el Consulado” dominicano en esta ciudad.
Franklin Rodríguez, dirigente de la Fuerza del Pueblo, criticó hace unos días al partido oficialista en la ciudad de Nueva York, acusándolo de usar los recursos del Estado y de organizar «rifas, bingos y fiestas» para costear la campaña política, a lo que Yulín Mateo, quien además es vicecónsul, le respondió:
“Desesperado, adquiriendo el pensamiento de su jefe político Leonel Fernández, él se hace eco de una noticia realmente débil, sin fundamento, donde él dice que nosotros aquí usamos los recursos del Estado, del Consulado, para hacer campaña y a la vez se contradice cuando dice con rifitas, con bingos y con fiestecitas es que nosotros realmente hacemos la campaña”.
El presidente del PRM NY marcó una gran diferencia en cuanto al estilo de gobernar tanto del PLD como de la Fuerza del Pueblo, con relación a Luis Abinader, a quien los organismos internacionales valoran por su lucha contra la corrupción.
“Fueron 50 vicecónsules que encontramos y 31 de ellos cobrando en Santo Domingo, en dólares, y hoy nosotros hemos transparentado, hemos moralizado el Consulado: somos 7 vicecónsules y todos, incluyendo quien les habla, cumplimos nuestro horario de trabajo”, resaltó Mateo.
“Nosotros, específicamente yo, para poder ser vicecónsul de la República tuve que entregar mi residencia de 35 años en este país; 35 años trabajando con la frente en alto, nadie podrá señalarme que no sea decir que soy un hombre trabajador: trabajé en el volante como taxista y trabajé en compañías de limpieza, con mucho orgullo y moralidad”, destacó.
El también coordinador general de la campaña del PRM en Nueva York concluyó sus declaraciones de la siguiente manera: “Hoy, nosotros decimos que no hay realmente fuerza que no sea el Señor que detenga Luis cuatro años más”.
Yulín Mateo vertió sus palabras en el marco de una rueda de prensa, celebrada en un restaurant ubicado en la calle Dyckman, en el Alto Manhattan, acompañado de los principales dirigentes del PRM y los partidos y movimientos aliados.
