WASHINGTON.- La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, ha asegurado que en el caso de que gane las elecciones presidenciales que se celebran en menos de tres semanas su Gobierno no será una «continuación» de la del actual presidente, Joe Biden.
«Déjame ser muy clara: mi Presidencia no será una continuación de la de Joe Biden. Como cada nuevo presidente que asume el cargo, aportaré mis experiencias vitales, mis experiencias profesionales e ideas frescas y nuevas. Represento a una nueva generación de liderazgo. Yo, por ejemplo, soy alguien que no ha pasado la mayor parte de su carrera en Washington», ha declarado en su primera entrevista en Fox News.
El periodista, Bret Baier, antes de darle el turno de palabra a la aspirante presidencial ha reproducido vídeos de entrevistas en las que la demócrata dijo que no podía pensar en nada que hubiera hecho de forma diferente a Biden durante los últimos cuatro años, revelando la delgada línea de Harris entre ser leal y distanciarse de la Administración.
Ya en la víspera, Biden dijo que Harris «seguirá su propio camino» si gana los comicios del 5 de noviembre: «Todo presidente tiene que seguir su propio camino. Eso es lo que hice. Fui leal a Barack Obama, pero seguí mi propio camino como presidente. Eso es lo que va a hacer Kamala (Harris). Ha sido leal hasta ahora, pero seguirá su camino», declaró.
TAMBIÉN SE DISTANCIA DE TRUMPLa candidata demócrata también se ha distanciado de su rival republicano, el expresidente Donald Trump, al manifestar que quiere «pasar página de la retórica de la que la gente está francamente cansada». «Hemos estado agobiados por el tipo de retórica de Trump que ha sido diseñada e implementada para dividir nuestro país y hacer que los estadounidenses literalmente se señalen con el dedo unos a otros», ha dicho.
La retórica de Trump, ha remarcado la vicepresidenta estadounidense, «sugiere que la fuerza de un líder se basa en a quién derrotas», en vez de «a quien ensalzas». «La gran mayoría de nosotros tenemos más en común que lo que nos diferencia», ha expresado. También ha recordado que un presidente debe enfrentarse a las críticas, después de que el magnate hablara sobre «encerrar a quienes están en desacuerdo»: «Esto es una democracia», ha zanjado.
Por otro lado, ha defendido los esfuerzos de su Administración para encontrar soluciones a los problemas migratorios y ha atacado al Partido Republicano –que ha centrado su campaña en este tema– al hacer referencia al proyecto de ley bipartidista de seguridad fronteriza bloqueado en las Cámaras del Poder Legislativo. «El punto es que tenemos un sistema de inmigración que no funciona y que necesita ser reparado», ha dicho.
Al ser preguntada desde cuándo ha sido consciente de los problemas de agudeza mental de Biden, que le forzaron a abandonar a los 81 años la carrera por la reelección, ha asegurado que el presidente «tiene el criterio y la experiencia para tomar decisiones muy importantes en nombre del pueblo estadounidense». «Biden no está en la papeleta y Trump sí», ha concluido al hilo de las recientes dudas sobre el estado mental del candidato, de 78 años, tras un mitin cerca de Filadelfia.